Jesús Augusto Sarcos Romero: ¿Qué hacer en los Alpes Suizos?
La zona de los Alpes Suizos ocupa la mayor parte del territorio suizo, aproximadamente el 62,5 por ciento del país, en sus zonas central y sudoriental, por ello se le considera un elemento fundamental de la idiosincrasia del país.
Se trata de una zona de levantamiento reciente que da su nombre a la orogenia alpina producida durante el terciario o cenozoico, que se va elevando progresivamente, con una altitud media de unos 1.700 metros sobre el nivel del mar, pero que posee numerosas cumbres de más de 4.000 metros de altura.
Gran parte de este vasto espacio alpino no puede ser explotado, ni siquiera de forma extensiva. Pero
los Alpes sirven, ante todo, como espacio de ocio y recreo, particularmente para la gente de ciudad.
Un 60 por ciento de los recursos nacionales del sector turístico se genera con el turismo alpino. Este progreso impulsó la creación de empleo en las zonas montañosas, pero también provocó serios problemas ecológicos, porque, a pesar de la densa red de comunicaciones ya existentes, los turistas prefieren ir en coche.
Las cumbres principales de los Alpes suizos son el Dofourspitze (4.634 msnm) y el Dom (4.545 msnm), pero hay muchas otras por encima de los 4.000. La altitud media es de 1.700 msnm.
Si se desea esquiar en los Alpes suizos hay opciones para todos los niveles y bolsillos. Desde los más modestos Alpes del cantón de Vaud (Diablerets, Villars) hasta la exclusiva estación de St Moritz (en el cantón de Grisón). Otras estaciones de esquí suizas especialmente recomendables son: Zinal, Crans Montana, Portes du Soleil (unión de varias estaciones suizas con otras francesas), Leukerbad, Saas Fee o Davos.
En general los Alpes es un área súper tranquila donde reina el silencio casi las 24 horas del día. El sonido más fuerte es el del tren cuando pasa cerca. Fuera de eso, silencio y paz.
Los Alpes Suizos son el origen de importantes ríos europeos como el Rin, están limitados por los lagos Leman y Constanza, y divididos en dos grandes áreas: la occidental y la oriental.
Si se decide combinar la naturaleza con actividades culturales, la mejor opción es establecer la base en una ciudad cercana a los Alpes suizos: hay muchas estaciones de esquí a las que se puede llegar cómodamente en tren hasta la base del teleférico.
Las autoridades suizas han realizado grandes esfuerzos para permitir el desarrollo turístico de la zona sin por ello renunciar a mantener la originalidad y el encanto de sus pueblos y aldeas. La política de minimizar el uso del turismo particular se basa en una avanzada red de transporte públicos que nos permitirá llegar a cualquier lado: en los Alpes suizos, por lejano e inaccesible que sea un lugar, siempre hay una buena combinación de tren y autocar para llegar.
