Jesús Augusto Sarcos Romero: Petra, una ciudad esculpida en roca
Es una de las siete maravillas del mundo, Petra, es sin duda el tesoro más preciado de Jordania y la atracción turística más significativa. Este es un importante enclave arqueológico y está situado en la capital del antiguo reino nabateo.
Es una enorme ciudad excavada por completo en las rocas por los nabateos, una tribu árabe muy trabajadora que se estableció en la zona hace más de 2.000 años y la convirtió en una importante ciudad de paso que unía las rutas de la seda, las de las especias y otras que conectaban a China, la India y el sur de Arabia con Egipto, Siria, Grecia y Roma.
El asentamiento de Petra se localiza en un valle angosto, al este del valle de la Aravá que se extiende desde el mar Muerto hasta el Golfo de Aqaba. Los restos más célebres de Petra son sin duda sus construcciones labradas en la misma roca del valle (hemispeos), en particular, los edificios conocidos como el Khazneh (el Tesoro) y el Deir (el Monasterio).
Petra es conocida como la ciudad perdida porque si bien su historia se remonta a la época de los nabateos, en el siglo VII a.C, en la Edad Media ya fue completamente abandonada y no fue “descubierta” por los occidentales hasta principios del siglo XIX.
En concreto, fue el explorador suizo Johann Ludwig Burckhardt quien en 1812 consiguió que los habitantes locales le llevaran a conocer esa ciudad perdida de la que se hablaba.
Aunque Petra era una leyenda, tuvo que llegar el explorador Burckhardt para que fuese una realidad. Desde su hallazgo, han sido millones de turistas los que han acudido a Jordania para poder admirar esta antigua ciudad, donde Indiana Jones y muchas películas más han sido rodadas, y que se ha convertido en el lugar más visitado del país, pese a que el patrimonio jordano es inmenso.